Es aconsejable que los visitantes consulten el sitio web oficial antes de su visita, ya que estas normas pueden actualizarse o modificarse en función de circunstancias o acontecimientos concretos.
Todos los visitantes deberán presentar una entrada válida para entrar, que deberán adquirir con antelación debido a la gran demanda. Las entradas incluyen el acceso a la visita al estudio y no pueden adquirirse in situ.
Aunque no hay un límite de tiempo estricto, una visita típica dura aproximadamente de 3 a 4 horas. Esto permite a los visitantes disfrutar plenamente de todos los decorados, el atrezzo y el vestuario expuestos.
Los visitantes pueden llevar su propia comida y bebida, pero deberán consumirlas en las zonas de picnic designadas o en la cafetería del backlot. No se permiten las bebidas alcohólicas.
No hay un código de vestimenta formal; sin embargo, se recomienda llevar ropa y calzado cómodos, ya que la visita implica caminar bastante. Los disfraces y la vestimenta temática de Harry Potter son bienvenidos.
Los estudios Warner Bros. desaconsejan llevar equipaje voluminoso, pero ofrecen un servicio de guardarropa donde es posible guardar los objetos cuya entrada haya sido denegada.